Cómo me gustan los chollos

Vengo eufórica perdida.

Veréis, en las fiestas navideñas siempre organizo una comida o una cena. Este año me ha tocado Sant Esteve, el día 26. Seremos poquitos, sólo 12 (hemos llegado a ser 20) pero no cabemos en mi mesa de comedor, que es justita porque no la usamos demasiado.

Llevaba desde ayer en búsqueda y captura de una mesa de cocina extensible, para añadirla a la del comedor cuando venga gente y de paso para cenar en la cocina y ensuciar así menos.

Estuvimos en varias tiendas de muebles, muchas cerradas por el puente. Vi varias preciosas pero no bajaban de los 250 €. Encontramos una bastante mona pero teníamos que encargarla y salía por 125 euros. Le pedí tarjeta y nos fuimos.

Esta mañana nos hemos acercado en autobús al Alcampo. Hemos visto una de exposición que marcaba 29,88 euros, muy mona, con estructura de aluminio mate y sobre en rojo, con las dos alas extensibles. Cerrada hace 1.02m x 60 cm y abierta 1.68m. La pega es que tenía una pata coja. Después de esperar a la encargada de mueblería un buen rato, ha venido diciendo que nos la teníamos que llevar tal cual, montada y todo.

Imposible porque no tenemos coche. Ni cortos ni perezosos hemos cogido una llave inglesa, hemos desmontado la mesa y hemos ido para caja. Al pasar nos han cobrado 19,88 euros, ya que en teoría estaba tarada.

El bus ha venido enseguida y en un ratito estábamos en casa. Al montarla de nuevo hemos visto que simplemente estaba mal ensamblada y nos ha quedado la mesa impecable, por menos de 20 euros.

Qué bien sienta encontrar chollos.