Tristeza = incursión en El Corte Inglés

Ayer mañana me levanté cansada pese haber dormido bien y no me cundían los minutos. Me fui de casa corriendo, me tuve que maquillar en el metro (y no soy la única, delante mía había otra treintañera haciendo lo mismo) y cuando estaba poniéndome al día con la agenda recibí un bofetón emocional.
Me di cuenta de que era el cumpleaños de mi padre. Ayer hubiera hecho 61 años. Se me saltaron las lágrimas, hice de tripas corazón y llegué al trabajo.
Por suerte hubo mucho movimiento pero a mediodía, cuando la cosa estaba calmada, llamé a mi costillo y le dije que me iba al CI, que estaba de bajón.

Y aquí están mis nuevos tesoritos:

Primero estuve en MAC. Compré la shale (un must, un color precioso y polivalente) y la samoa silk, que sólo se hace para paleta, que es la naranjita. Buscaba algo anaranjado para clonar los looks que se han visto en pasarela con ojos azules y pensé que la samoa era diferente a las que tengo porque es mate y con el bare study puede quedar muy bien.

Luego me acerqué a Armani. Estuve el otro día con mi amiga Paquita y en el foro maccounter habíamos hablado de la colección nueva de primavera y de lo alegres que eran sus tonos rosas. Así que me estrené con la firma y me compré el lip wax 7, en un color fucsia precioso. La textura es genial y dura puesto muchísimo.
La chica me abrió ficha y me dio una muestra de Luminous silk foundation en tono 5, que tengo pendiente de probar.

Y ya me iba cuando me acordé de las ofertas en el corner de Sephora. Días atrás me había mirado las sombras de Cargo. Así que me cogí 2 duos, que estaban muy bien de precio. El omaha, con una sombra verde parecida a la del Habanera de Nars pero con más azul y un halo dorado y con otra azul klein que tira a lila. Y el duo Arizona, con una sombra en tono piel-melocotón y otra parecida a la trax de MAC.
También me traje por un euro la mousse limpiadora de Sephora.

Llegué al trabajo contenta. Mi compañero me dijo que era un buen homenaje a mi padre estar guapa y haberme gastado el dinero de lo que hubiera sido su regalo en mí.